Las boticas de los pueblos más pequeños caminan hacia la desaparición
Las boticas de los pueblos más pequeños están desapareciendo, tanto que en la provincia de Cuenca, en 7 años han cerrado ya 11 farmacias. El sector alerta de la situación y pide más ayudas porque los boticarios son los únicos sanitarios que hay en muchos núcleos rurales.
Servicio imprescindible en Albaladejo del Cuende
Amparo lleva 20 años al frente de la botica de Albaladejo del Cuende, Cuenca. En el pueblo son alrededor de 200 vecinos, y confirman que este servicio es imprescindible, "Aquí hay gente mayor que no podía trasladarse a otro sitio a por medicinas" mantiene un vecino del pueblo.
La farmacéutica, además, asegura que este servicio es muy necesario, sobre todo para los más mayores "Les da pie a poder seguir quedándose en el pueblo y mantenerse en el pueblo, si no muchos tendrían que irse con los hijos o a una residencia", asegura Amparo.
Las ayudas son insuficientes
La farmacia recibe ayudas por estar incluida en aquellas que corren el riesgo de desaparecer. Dichas ayudas, según Amparo, son insuficientes "No tienes ni para los gastos" .
La presidenta del Colegio Oficial de Farmaceúticos de Cuenca, Luz Moya Plaza, afirma que "La mayoría de las ayudas que se están prestando a estas farmacias de viabilidad económica comprometida es entorno a los 200 o 300 euros mensuales".
Ahora, el Senado ha aprobado una moción para actualizar y vincular esa prestación con el IPC. De momento, es solo una propuesta. "Yo hasta que no lo vea, es que saben que existimos, pero yo no veo que hagan nada para mantenernos", dice la farmacéutica.
Amparo habla y escucha a sus vecinos, controla la medicación que toman, y se pregunta si, a medio plazo, podrá seguir prestando un servicio fundamental que, como el bar, la tienda o el colegio, tira hacia delante de este pueblo conquense.