El álbum de Tomás Alía del Corpus de Lagartera: "La mayor eclosión estética del país"

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Elena Garcia Fermosel
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Si para Antonio Machado su infancia eran los recuerdos de un patio de Sevilla, para el diseñador e interiorista Tomás Alía su infancia está vinculada al hinojo, la hierbabuena o la albahaca que tapizan las calles de Lagartera durante su procesión del Corpus Christi. Aromas mezclados con tapices, manteles, tejidos y bordados con nombres imposibles: gorguera, jamalleras, guardapies..., que salen a la calle solo durante unas horas en este municipio toledano, las horas que dura la procesión del Corpus.

"Nadie es lo suficientemente contemporáneo hasta que no se reconcilia con su pasado", nos cuenta Tomás cuando recuerda su infancia en Lagartera

Su vida está vinculada a todo un legado textil, el de la escuela de Labranderas de la labor de Lagartera que desde 1320 es seña de identidad cultural de todo un pueblo. Tomás ha sido testigo, de la mano de su madre Pepita Alía, maestra artesana y tesoro viviente, que le ha transmitido su pasión por toda la estética patrimonial que hace de Lagartera un escenario único en Europa todos los años coincidiendo con la celebración del Corpus Christi.

La infancia de Tomás Alía y el Corpus de Lagartera

Con su madre viajaba cargado con textiles con más de cien años de historia que montaban y desmontaban para mostrar  la riqueza patrimonial de Lagartera, "era toda una eclosión estética efímera".

Todo un ritual en las casas de los lagarteranos cada fiesta del Corpus Christi porque es el momento en que salen de los arcones tesoros ocultos en forma de tejidos, trajes de valor incalculable, "con reminiscencias sefardíes, que podrán ser admirados por los que acudan a Lagartera en un espectáculo visual incomparable".

[caption id="attachment_116727" align="alignnone" width="702"] Tomás Alía con sus padres durante una exposición en el Palacio Tavera en 1972[/caption]

Altares y trajes de Lagartera que dejaron de vestir de forma diaria en 1936

En el Corpus Christi se despliegan en un alarde de colores, formas y dibujos, no sólo los trajes regionales de lagarterano y lagarterana. Quizás pocos sepan que eran sus ropajes habituales, los que vestían a diario los vecinos y las vecinas de este pueblo toledano "hasta que en 1936 dejaron de vestirlos porque se mofaban de ellos", nos cuenta Tomás Alía.

[caption id="attachment_116737" align="alignnone" width="560"] Altar del Niño Jesús (Foto: instagram Tomás Alía)[/caption]

Con ellos desfilan en la procesión las lagarteranas y lagarteranos que a primera hora de la mañana han montado los altares en las puertas de sus casas con colchas centenarias y una mesa que transforman en altares que son vestidas ritualmente con delanteras, corredores, colgaduras.

Cada una de estas telas que tiene su significado, sirve de trono a una talla del Niño Jesús encargada de recibir a la Custodia. Tallas, muchas de ellas del siglo XVII y XVIII a las que se les viste con las típicas faldas de gala de los pequeños lagarteranos.

"Es un momento muy efímero en el que el visitante puede apreciar toda esta riqueza porque dado el valor incalculable de los trajes y de los tejidos tienen que desmontarse pronto los altares para preservar este patrimonio, como ocurre con los tapices que engalanan la catedral de Toledo en el Corpus", nos cuenta Alía.

La procesión del Corpus de Lagartera data de 1590

[caption id="attachment_116741" align="alignnone" width="556"] Altar procesional (Foto: instagram Tomás Alía)[/caption]

El Corpus Christi de Lagartera se institucionaliza en Lagartera el día 21 de febrero de 1.589 y es al año siguiente, el día 21 de junio, tiene lugar la primera procesión del Corpus en Lagartera. Cinco siglos de historia en las que se conserva toda su esencia e incluso el mismo recorrido.

[caption id="attachment_116749" align="alignnone" width="697"] Tomas Alía siendo mayordomo de la Santa Vera Cruz[/caption]

La Santa Vera Cruz es la encargada de encabezar el desfile procesional. Tomás Alía, como mayordomo de esta hermandad en 2018, fue uno de los sustentadores de esta tradición. "Fue un recuerdo imborrable, acompañado de centenares de amigos y de parte de las hermandades y cofradías que procesionan en el Corpus Christi de Toledo", recuerda Tomás.

Alía y su apuesta porque las labores de Lagartera sean Patrimonio Inmaterial de la Humanidad

[caption id="attachment_116747" align="alignnone" width="722"] Mujeres lagarteranas (Foto: intagram Tomás Alía)[/caption]

Vivencias que han forjado la identidad de Tomás Alía e incluso han definido su labor profesional. Su empeño es que las labores de Lagartera sean reconocidas como Patrimonio Inmaterial de la Humanidad.

De momento el Corpus está reconocido como Fiesta de Interés Regional y Bien de Interés Cultural, pero Tomás apuesta por ir a más. Se ha convertido en uno de las grandes embajadores de Lagartera para dar a conocer toda la riqueza patrimonial que esconde este pequeño municipio.

[caption id="attachment_116751" align="alignnone" width="580"] Famosos han conocido el Corpus de Lagartera gracias a Tomás Alía[/caption]

Y al igual que su madre Pepita Alía le infundió su pasión por la tradición de la labor de Lagartera, Tomás atrae a conocidos y desconocidos a empaparse de una riqueza patrimonial que puede ser también la tabla de salvación del riesgo de despoblación que corre Lagartera.

"Hay que apostar por una sociedad artesana que transforme Europa en un país verde y sostenible. Inculcar a los jóvenes que nuestras manos pueden salvar a nuestros pueblos"

Toda una cruzada para que la artesanía no desaparezca que se ha marcado como objetivo y que, con la pandemia, cree ha salido más a la luz que nunca. Y animar a visitar el Corpus de Lagartera este 19 de junio, que se vivirá sin restricciones después de dos años, es batalla ganada para ayudar a impulsar esta iniciativa.

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