ALBACETE
Investigado por conducir a 123 km/h por el término municipal de Golosalvo, limitado a 50 km/h
Los hechos podrían ser castigados con la pena de prisión de 3 a 6 meses o con la de multa de 6 a 12 meses
Investigado el conductor de un turismo, de 49 años de edad y residente en la provincia de Valencia, como presunto autor de un delito contra la seguridad vial al circular a una velocidad de 123 km/h por un tramo de travesía, en el término municipal de Golosalvo, donde el límite de la velocidad está en 50 km/h.
Los hechos se produjeron cuando la velocidad de un turismo que circulaba por la carretera N-322 (Linares A-32 – Requena A-3), a su paso por la localidad albacetense de Golosalvo, era captada por un radar estático de la Guardia Civil del Subsector de Tráfico de Albacete.
Una patrulla del Subsector del Trafico de la Benemérita albaceteña, que prestaba servicio en el operativo de control de velocidad, procedió a la parada del turismo identificando a su conductor, que resultó investigado por un delito contra la seguridad vial, al conducir un vehículo a motor, a velocidad superior en 60 km/h de la permitida reglamentariamente en una travesía.
Las diligencias policiales fueron instruidas por agentes del Grupo de Investigación y Análisis (GIAT) del Subsector de Tráfico de la Guardia Civil de Albacete, que fueron puestas a disposición del Juzgado de Instrucción de la localidad albacetense de Casas Ibáñez, que ha entendido de los hechos.
Penado con prisión de tres a seis meses
Los hechos descritos podrían ser castigados, según establece el artículo 379.1 del Código Penal, con la pena de prisión de tres a seis meses o con la de multa de seis a doce meses o con la de trabajos en beneficio de la comunidad de treinta y uno a noventa días, y, en cualquier caso, con la de privación del derecho a conducir vehículos a motor y ciclomotores por tiempo superior a uno y hasta cuatro años.
El exceso de velocidad aumenta el tiempo necesario para frenar, eleva la probabilidad de que el conductor pierda el control del vehículo y disminuye la capacidad de anticiparse a probables peligros, aumentando el riesgo de accidente y la gravedad de las posibles lesiones corporales.