ALBACETE

Dos personas investigadas por estafar 17.000 euros a un vecino de Aguas Nuevas

Hackearon las cuentas de correo electrónico de dos empresas de Albacete y Aguas Nuevas y se hicieron pasar por proveedores para contactar con otras personas, alegando el impago de facturas y así conseguir estafarlas 

Dos personas investigadas por estafar 17.000 euros a un vecino de Aguas Nuevasguardia civil albacete

Redacción CMM
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Dos personas, vecinas de Asturias y León, han sido investigadas por estafar hasta 17.000 euros a un vecino del municipio albaceteño de Aguas Nuevas.

Las investigaciones comenzaron en el mes de abril de 2023, cuando la víctima de la estafa denunció ante la Guardia Civil haber recibido un correo electrónico de una empresa con la que supuestamente tenía relaciones comerciales. Estos reclamaban el pago de una factura atrasada por valor de 17.503,45 euros.

Los estafadores indicaron a la víctima la cuenta bancaria a la que tenía que ingresar el importe, una cuenta nueva. Una vez abonado este importe, la víctima contactó con la empresa a la cual adeudaba esta cantidad, informándole que no habían recibido el pago, momento en el cual se percató de la estafa.

Estafa BEC (Business E-Mail Comprimise)

Como explica la Benemérita en nota de prensa, este tipo de estafa consiste en que un ciberdelincuente, mediante engaño y desde direcciones de email que simulan ser legítimas, intercepta una transacción comercial logrando derivar el dinero a un número de cuenta de su interés. Se trata de un delito conocido como BEC (Business E-Mail Compromise). 

   

Los investigados, tras hackear las cuentas de correo electrónico de dos empresas de Albacete y Aguas Nuevas y pasar a tener el control absoluto de ellas, pudieron hacerse pasar por un proveedor. Este supuesto proveedor, tras contactar telefónicamente con las empresas y comunicarles el impago de unas facturas, les remitió un correo, muy similar al habitual, donde les indicaba que la empresa había cambiado su número de cuenta bancaria, con la intención de que los pagos fueran a parar a las cuentas de los defraudadores.

Los investigados abrieron una cuenta bancaria online para dificultar una posible investigación policial. Para ello emplearon documentación falsa, para mover el dinero estafado a otras cuentas ubicadas fuera de España, concretamente a Hungría y Polonia donde, una vez allí, fue extraído de forma física.

En la actualidad, la Guardia Civil ha solicitado la pertinente colaboración entre España y estos países para identificar y detener a la persona que extrajo el dinero defraudado.