40 años de Constitución, 40 hitos: las Tablas de Almagro

[Este reportaje forma parte del especial de 40 reportajes sobre cómo ha afectado la democracia y la Constitución a Castilla-La Mancha en estos 40 años]

Dentro de la piscina del Parador una periodista. Fuera, un político y el dramaturgo del momento deseosos de dar la exclusiva. "Y no, es que estoy mojada, es que no tengo toalla...no, no…te traemos una toalla…No pero es que no tengo donde coger nota tengo un cuaderno tuve que salir de la piscina en topless", dice Rosana Torres, periodista.

Y así contar que en Almagro nacía la Compañía Nacional de Teatro Clásico: el artífice, Adolfo Marsillach. "Es un enorme pensador y uno de los responsables de que Almagro sea hoy en día lo que es", dice Ignacio García, Director Festival. "Apuesta por un teatro clásico que no estuviera lleno de polvo, que no fuera naftalina", afirma Rosana Torres, periodista.

Ellos trajeron el canon, cómo llevar a escena los clásicos más allá de los libros. "Entendieron que en esa democracia incipiente el Teatro Clásico debía ser un patrimonio de todos y quien tuviera la idea que el Siglo de Oro y Calderón se habían utilizado propagandísticamente durante la dictadura había que desvincularlo", asegura Ignacio García, Director Festival. "Ese público que soñara Marsillach y sus compañeros de aventura es ese público que nos interpela, no es un público pasivo. Es el público que nos exige", Helena Pimienta, Directora CNTC

Público que le dio casa de verano en plena Mancha: el Hospital de San Juan. "Soñaron que el Siglo de Oro podía releerse otra vez desde una óptica de un valor muy importante en la Transición Española que fue la concordia", afirma Ignacio García, Director Festival.

"Nos necesitamos mutuamente, nos complementamos y tenemos mucho camino por hacer", señala Helana Pimienta, Directora CNTC. Sólo así el festival crece entre sagas y firmas inmortales como la de Nieva. Almagro y la Nacional…dos clásicos que no caducan.